El Fjord Noruego es una de las razas equinas más antiguas y puras que se conocen. Y es que a pesar de haber sido domados durante siglos, siguen teniendo un aspecto similar al de los caballos primitivos como el Przewalski. Por ello, aunque su origen no es del todo cierto, se cree que esta raza de caballos noruegos está relacionada con el Przewalski, el caballo salvaje primitivo de Asia.
Caballo de cascos firmes y una increíble fuerza, son ideales para el trabajo pesado. Sobre todo en la montaña. Y es que son animales adaptados a las duras condiciones de la montaña y son capaces de llegar donde los tractores no llegan. De ahí que este caballo ya no sólo se encuentre sólo en Noruega. Podemos encontrarlo en toda Escandinavia y en otros países, utilizado sobre todo como poni de tiro ligero.
La alzada de este poni es de 130-145 centímetros y pesa entre 350 y 450 kilos. Lo más característico de esta raza es su crin, blanca con una línea negra en medio. Esta línea va desde el tupé hasta la cola, pasando por las crines y el dorso. Podemos incluso encontrar individuos con listas acebradas en las extremidades.
Su manso temperamento y su increíble fortaleza los hacen ideales para las tareas de granja. Además, son muy resistentes y capacitados para el trabajo pesado. Son muy voluntariosos a la hora de ponerse a trabajar.