Prof.Werner F.Kirschbaum B.Sc.Agr.
Contrariamente a la DC en humanos, también
llamada dislocación congénita de cadera, la DC canina
no es una condición congénita. Su mayor evolución
se produce dentro de los 6 meses de edad y en casos severos sus
rasgos pueden ser ocasionalmente observados en necropsias de cachorros
de 14 días o 3 semanas de edad. Frecuencia y severidad se
encuentran por un número de factores, de los cuales sólo
algunos son conocidos. Por el momento la forma más eficaz
de diagnóstico de la DC es por radiografía de ambas
articulaciones de la cadera del perro adulto. La expresión
radiográfica de la DC, por ej.: acetábulo aplanado,
sub-luxación o luxación de la cabeza femoral o cambio
de la forma de la cabeza o cuello femoral, y formación de
osteofitos peri articulares, se encuentra genéticamente controlada.
La expresión cuantitativa de la DC, que se manifiesta en
diferentes graduaciones, es consistente con una herencia poligénica.
Las heredabilidades que fueron inicialmente estimadas indican que
factores del medio son a su vez de importancia considerable para
el desarrollo y severidad de la DC. La nutrición, dado que
afecta la tasa de crecimiento, es el único factor ambiental
que se ha investigado exhaustivamente. Se encontró que cachorros
nacidos por cesárea y alimentados artificialmente, a mano,
con una dieta de bajo tenor calórico, poseían una
frecuencia de DC menor que los nacidos naturalmente, alimentados
por la madre. Luego se encontró que cachorros destetados,
alimentados con una dieta de bajas calorías poseían
una frecuencia menor de DC que sus hermanos de lechigada alimentados
con una dieta de alto tenor calórico. También se determinó
que la frecuencia de DC en perros adultos se encontraba correlacionada
con su peso cuando poseían 60 días de edad. De acuerdo
con este informe, el peso por encima de la media para el sexo y
raza a los 60 días de edad aumentaba el riesgo de desarrollar
DC. Se demostró que los Ovejeros Alemanes, con alta frecuencia
de DC poseían un crecimiento más rápido, y
una maduración más temprana del esqueleto, que los
Galgos de carrera que están libres de DC. Los esfuerzos para
reducir la frecuencia de DC en las primeras épocas en varias
razas, o bien han fracasado o fueron sólo moderadamente exitosos.
La reducción importante y constante, ha sido obtenida exclusivamente
en sólo pequeñas poblaciones, con selección
muy estricta contra la DC. Varios métodos de selección
han sido sugeridos. La primera fue una selección masal, es
decir individuos seleccionados sobre la base de su status individual
de DC, y prueba de progenie considerando individuos según
sus descendientes. No se llegó por los resultados a un método
preferencial. A raíz de la confusión que existía
entre profesionales y criadores de perros sobre cómo atacar
el problema de la DC, un equipo importante y numeroso de investigadores
en Suecia se dedicó a estudiar este tema a fondo. Para ello
consideró necesario recurrir a una población de perros
bien estabilizada, con la menor variabilidad posible, con el objeto
de llegar a una evidencia final y concluyente sobre la heredabilidad
de la DC, y el valor de la selección de la misma. Con tal
objeto se recurrió a la población estable de Ovejeros
Alemanes del centro de entrenamiento de perros de las Fuerzas Armadas
de Suecia trabajando sobre datos de casi 10 años. Basado
en estos análisis un programa de selección se llevó
a cabo y se registraron los datos de la DC a través del tiempo.
Sobre la base de estos resultados, se efectuaron recomendaciones
sobre qué medidas deberían tomarse y cómo seleccionar
el material de cría con el objeto de disminuir la continuidad
y severidad de la DC. Se analizaron 2.404 perros en los años
de trabajo, que llegaron por lo menos a los 15 meses de edad. Los
perros se mantuvieron en el centro hasta los 60 días y luego
fueron a casas particulares hasta los 15 meses. Vuelven al centro
de las F.A. para un análisis físico y radiográfico
de las articulaciones de cadera. Los perros eran producto de 401
lechigadas. La mayoría de las perras, 185 sobre 205, habían
nacido y fueron criadas en el centro, lo cual significaba que muchas
fueron analizadas como progenie en la primera mitad de la investigación.
Fueron apareadas y tuvieron descendientes durante la segunda etapa
de la investigación. Con 3 excepciones las hembras no fueron
apareadas con un macho determinado 2 veces, y el número de
lechigadas obtenidas de cada hembra variaba de 1 a 5, con 3 siendo
la figura más representativa. Solamente 10 de los machos
nacieron en el centro. Los machos fueron representados por más
de 100 descendientes. Las articulaciones de cadera de todos los
animales parentales y el status de las mismas fue registrada. Rx
repetidas fueron asentadas en los registros del centro. El diagnóstico
sobre el último examen Rx fue utilizado para caracterizar
las articulaciones de cadera, de cada perro.
ESTIMACION DE LA HEREDABILIDAD
El carácter de la DC no responde a un modelo cualitativo
en el cual el efecto de los genes se puede observar individualmente
produciendo clases fenotípicas discretas. El carácter
de la DC en cambio muestra una variación continua con un
conjunto amplio de fenotipos. Ello indica que el carácter
es producido por un conjunto de poligenes no observables puesto
que su efecto es aditivo. Contrariamente a los caracteres cualitativos,
en los cuantitativos el medio tiene un amplio efecto en los mismos.
El mecanismo de la herencia de caracteres cuantitativos, únicamente
puede analizarse por la vía de métodos estadísticos.
El término heredabilidad evoca la imagen de transmisión
de padres a hijos y se utiliza para caracterizar el parecido en
individuos emparentados. La heredabilidad es una propiedad de una
población en este caso de perros y no de individuos. Sobresimplificando
el concepto, significa en cuanto se parecen los hijos a los padres
seleccionados dentro de una población determinada debido
a la acción aditiva de los genes que influyen en el carácter.
La heredabilidad para la DC y peso a los 60 días fue estimada
utilizando un programa standard estadístico de análisis
del cuadrado de la varianza.
Los resultados obtenidos fueron los siguientes:
Frecuencia de DC en los descendientes de padres libres de DC o con
DC:
La frecuencia de DC fué menor en los descendientes de padres
libres de DC. Cuando uno o ambos padres tenían DC, la frecuencia
y severidad de la DC aumentaba en los descendientes.
Frecuencia de DC en los descendientes de madres libres de DC o con
DC de diferentes grados de severidad:
Hembras libres de DC como también aquellas con DC, fueron
normalmente apareadas con machos libres de DC. Algunas hembras libres
de DC, como también algunas con DC, fueron sin embargo apareadas
con machos con DC. La frecuencia en los descendientes fue significativamente
más baja cuando las hembras eran libres de DC mientras que
aumentó en los descendientes de las madres con DC, independientemente
de la severidad de la DC que poseían las madres.
Frecuencia de DC en los descendientes correlacionando con el status
de la DC de ambos padres:
Cuando ambos, el padre y la madre, eran libres de DC la frecuencia
de DC en los descendientes era menor que cuando uno o ambos padres
la poseían. La frecuencia era mayor cuando la madre poseía
DC y sus padres eran libres de DC. La frecuencia resultaba con la
más alta incidencia, cuando la madre y ambos padres poseían
DC.
Frecuencia de DC en los descendientes correlacionando con el status
de la DC de la madre y sus hermanos de lechigada:
La frecuencia de DC en los descendientes fue más baja, cuando
ambos, la madre y todos sus hermanos de la lechigada eran libres
de DC. La frecuencia en los descendientes fue en cambio más
alta, cuando ambos, la madre y más del 50% de sus hermanos
poseían DC.
Frecuencia de DC en los descendientes de padres libres de DC:
Con machos libres de DC la frecuencia en los descendientes varió
ampliamente con un rango entre 21 y 69%. 5 hembras libres de DC
fueron apareadas con un mismo macho libre de DC, desarrollando en
25 de sus 35 descendientes DC, es decir un 71%. Las mismas 5 hembras
fueron apareadas con otro macho libre de DC desarrollando solamente
15 de 52 descendientes DC, es decir 29%.
Heredabilidad:
Basados en los componentes de la varianza, debidos al padre o a
la madre respectivamente, la heredabilidad fue estimada en 0,43
+/- 0.08 y 0.45+/- 0.08; es decir oscila entre 0.4 y 0.5. Con este
valor que indica casi un 50% de responsabilidad genética
en el carácter, se puede esperar una buena respuesta a la
selección. Cuanto menor es la heredabilidad, menos se puede
esperar por los datos de los antecesores y colaterales para tener
éxito en la selección. Debe recurrirse entonces principalmente
a los datos que ofrecen las pruebas de progenie.
DC y peso a los 60 días:
La media del tamaño de la lechigada y el peso de los cachorros
a los 60 días de edad aumentó para ambos sexos durante
el período de la investigación. El peso al año
de edad, encima o debajo de la media del año, no afectó
significativamente el riesgo de desarrollar DC. La heredabilidad
del peso a los 60 días, fue estimada en 0.42 +/- 0.08 cuando
se basó en los componentes de la varianza debidos al padre.
Diferencias del sexo en DC:
Frecuencia de DC fue más alto en las hembras. El tratamiento
estadístico dio cifras altamente significativas a esta diferencia.
DC y tamaño de la lechigada:
El tamaño de la lechigada no afectó la media del peso
de los cachorros a los 60 días de edad, o la frecuencia de
la DC en la progenie.
Efecto de la frecuencia de DC por cambios en el programa de selección
basados en el programa de la presente investigación:
Cuando después de los primeros años se dispuso de
suficientes datos del material original, se decidió aplicar
un criterio acorde con el mismo de selección en el centro.
Cuando era posible, solamente fueron utilizados para la cría
perros libres de DC, con padres libres de DC y que a su vez tuvieran
la mayoría de sus hermanos de lechigada libres de DC. Ningún
padre era utilizado extensamente sin que el análisis de la
DC de su 1ª lechigada fuera aceptable.
Esta investigación da amplio apoyo a descubrimientos anteriores,
que la DC es una condición hereditaria de naturaleza cuantitativa.
El haber encontrado una heredabilidad tan alta, como 0.4 a 0.5 en
la presente definida población de perros debe ser lo suficientemente
convincente para otorgar valor a la selección. Cuando los
reproductores o sus padres, o hermanos de lechigada poseen DC, el
riesgo que la condición se desarrolle en la progenie aumenta.
Contrariamente expresado en trabajos anteriores, inclusive en presencia
de una DC incipiente en uno o ambos padres, afecta el riesgo de
aparición de la DC en la progenie. Se obtuvo significativamente
menos DC cuando ambos padres eran libres de DC. La gran variación
en la frecuencia de DC, en la progenie producto de machos libres
de DC, podría ser explicada por las diferencias en el status
de las articulaciones de cadera de los padres de dichos machos y
hermanos de lechigada. Una indicación razonablemente buena,
de un reproductor macho, puede ser obtenida cuando el status de
la articulación de la cadera se conoce de 30 perros seleccionados
al azar de 5 a 10 lechigadas de su progenie. Los datos obtenidos
indican a su vez una baja correlación del efecto del medio
entre hermanos de lechigada con respecto al grado de DC. Contrariamente
a otros trabajos, en la presente investigación, no se encontró
una correlación entre el peso a los 60 días y una
aparición posterior de DC. En un trabajo anterior se obtiene
una curva de crecimiento desde el nacimiento hasta los 6 meses de
edad que sería de mejor indicación, para un estudio
de correlación entre la tasa de crecimiento y DC. Cuando
se obtuvieron los resultados preliminares, el programa de cría
se modificó de acuerdo con ellos obteniéndose una
marcada disminución en la tasa de DC. De 50% de DC, bajó
al 28% en 5 años considerando todos los grados y su grado
de gravedad 2 a 4 bajó del 32 al 15%.
Explicación genética de la aparición de cachorros
con DC provenientes de padres libres de DC:
Siendo la DC un carácter poligénico donde los genes
aditivos actúan con mayor influencia encontramos que un macho
libre de DC, puede llevar una cantidad de genes para DC, pero no
suficientes que sumados permitan desarrollar el carácter.
Cruzado con una hembra con las mismas características, puede
poseer una serie de genes que unidas y sumadas al del macho permitan
producir un porcentaje de DC en la progenie. La cantidad de hijos
con DC de estos padres sin DC, será mucho menor puesto que
se debe producir espermatozoides con una tasa alta de genes de DC,
que se unen a óvulos a su vez con una alta tasa de DC. La
probabilidad conjunta que se produzcan esta clase de gametas, espermatozoides
y óvulos y a su vez que se combinen entre sí, es bastante
baja. Como esta situación varía entre los distintos
machos y hembras, es por ello, que distintos machos libres de DC
apareados con distintas hembras libres de DC, dan distinta frecuencia
de cachorros con DC. Por ello de un macho debe continuarse la línea
con los hijos de cuyas hembras ha obtenido una baja proporción
de DC. El mismo procedimiento debe seguirse si se desea seguir una
línea materna. Lo ideal sería siempre cruzar con reproductores
que den hijos libres de DC. A través de la selección
de machos y hembras sin DC, el número de genes cuantitativos
en cada reproductor, baja en cada generación de manera que
a través de las generaciones la DC disminuye hasta desaparecer.
Vemos de acuerdo con los resultados obtenidos con el equipo Sueco,
que la tasa de DC disminuye de tal forma, que permitirá erradicarla
definitivamente. Debe considerarse que el arma más poderosa
para la selección de caracteres cuantitativos es la prueba
de progenie.
Debe enfatizarse de acuerdo a su vez con el trabajo de los suecos,
que al criar con padres libres de DC se obtiene una cierta proporción
de cachorros con DC de distintas proporciones. Por lo tanto, no
tiene ningún sentido utilizar para la cría machos
o hembras con DC por más baja que sea su graduación.
El trabajo debe consistir en eliminar la mayor cantidad de genes
productores de DC, en los reproductores sin DC a través de
las generaciones.
Referencias:
1 Hayward, G. (1992) Applied Genetics. London: Thomas Neulson and
Sons Ltd.
2 Hedhammer, A. et. al. Canine Hip Dysplasia: Study of Heritability
in 401 Litters of German Shepherd Dogs. J. Am. Vet. Med. Asoc. 174(9)
1012: 1016. (1979).
3 Falconer, D.S. (1960) Introduction to Quantitative Genetics. London:
Oliver and Boyd.
4 Mather, W.B. (1964) Principles of Quantitatives Genetics. Minneapolis:
Burges Pu. Co.
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