En los próximos
días entrará en vigencia una ordenanza municipal en
el distrito Del Pilar que sienta de alguna manera jurisprudencia en
la región, ya que aquel ciudadano que lastime, maltrate a un
perro o a un gato puede ser pasible de la aplicación de una
multa en pesos.
Multa que podría oscilar entre los 450 y 2250 pesos; dependiendo
lo que el Juzgado de Faltas dictamine. Como titulamos esta Ordenanza
declara a Pilar como "Municipio no eutanásico",
imponiendo normas bastante precisas acerca de cómo se debe
actuar con los animales de la calle (en particular, a los perros).
Control y menos crueldad
Los animales que suelen poblar las calles de los distritos, no
son los culpables de su destino, ya que un “humano”
es quien en la mayoría de los casos lo ha llevado a ese andar
perdido que incluso provoca accidentes.
Ya que no es idea de sacrificar al animal, sino controlarlo, promoviendo
la esterilización sanitaria, y sobre todo que estos no sean
blanco de maltrato y agresiones por parte de los humanos, por lo
que establece sanciones para las personas que sean descubiertas
en ese tipo de actitudes.
En los artículos 2° y 3° de la reglamentación
se establece que en el partido de Pilar "el método de
control de la población animal será la esterilización
de los mismos" y que sólo se autorizará el sacrificio
"cuando la enfermedad o estado de salud del animal fuera irreversible"
y únicamente "para evitar sufrimientos previos a su
muerte"
Lo que busca esta legislación es sentar una base jurídica
para prohibir en términos concretos la matanza de perros
vagabundos sólo por "limpiar la ciudad", dejando
en claro que "en ningún supuesto se podrá disponer
el sacrificio de un animal abandonado o callejero". La ordenanza
fue creada por la Dirección de Control No Eutanásico
de la Fauna Urbana.
En tanto se establecen nuevas normativas para la actuación
de la Dirección de Zoonosis. todo animal que muerda a una
persona o a otro animal será alojado en un lugar seguro por
la Dirección, alejado de personas o congéneres y bajo
control veterinario para verificar la presencia de enfermedades
y hasta que se observen indicios de su adaptación al medio
doméstico.
Y en el caso de que se trate de un animal sano, éste también
podrá quedar a cargo de sus amos, cumpliendo determinadas
medidas de seguridad dispuestas por la entidad municipal y cuya
violación será sancionada con el mismo rango de multas
que el maltrato animal. En los casos de animales vagabundos, éstos
serán derivados a refugios administrados por asociaciones
proteccionistas de Pilar, registradas como tales en el Estado municipal.
Fuente: Nota de Diario NP
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