Con un aspecto feo y deforme que, sin embargo,
ha llegado a convertirse en algo familiar, esta raza fue conseguida
hace muchos años, en Inglaterra para poder enfrentarse
a los toros en crueles combates programados como un acontecimiento
más de las fiestas locales. Parecen proceder de los feroces
molosos que importaron los romanos mezclados con perros de pelea
autóctonos de las islas británicas. Desde que
en 1835 ese espectáculo fue declarado ilegal se ha ido
dulcificando el carácter de esta raza, tomando ahora
un carácter perezoso y tranquilo, siendo apreciado ahora
como perro de compañía.
El Bulldog es un perro casero y familiar, alegre, amigable
y con ganas de ejercicio. Le gusta jugar con los más
jóvenes y es divertido por su paciencia y obstinación.
El perro Bulldog Inglés es un símbolo
en el Reino Unido, país donde recibe el nombre de British
Bulldog. Su club de raza es el más antiguo de todos,
data de 1875; así como su estándar, el primero
que fue redactado en el mundo canino.
A pesar de todos los estudios realizados,
sus orígenes siguen siendo inciertos. Lo que queda patente
es el hecho de que sus ancestros eran perros de pelea, de los
molosos, luchadores de la Antigua Grecia, llamados Molosi. Tanto
el Mastiff como el Bulldog y el Boxer poseen un antecesor común
pero es más que probable que fueran los antiguos Mastiff
los que más influyeran en la creación de la raza,
ya que la función principal de éstos era en su
origen la lucha contra los toros, muy populares hacia 1209.
En 1838 el Bulldog cayó en peligro de
extinción al prohibirse las peleas contra los toros;
sin embargo, el señor Bill George continuó criando
perros de esta raza y a él se debe su conservación.
Los primeros Bulldog antes de la segunda mitad
del siglo XX eran de osamenta más ligera, más
altos y con las extremidades más rectas. El primer ejemplar
que destaca en la formación del Bulldog tal y como le
vemos en la actualidad fue «Tredgold Gaius Caligula»,
ejemplar que se expuso en contadas ocasiones debido a su carácter,
aunque resultó ser un muy buen reproductor.
Uno de sus descendientes fue «Denbrough
Leander», padre de varios campeones, algunos de los cuales
presentaban grandísimas diferencias morfológicas
entre sí —unos de aspecto menos compacto que otros—,
lo que con el tiempo derivaría en dos líneas muy
diferentes de Bulldog. De entre sus hijos destacaban, por un
lado, «Beechlyn Golden Nugget of Denbrough» y, por
otro, «Bryneatons Barbarian». Descendiente del primero
fue «Aldridge Advent Gold», bastante pesado, con
una cabeza de abundantes arrugas y bien marcada, así
como costillas bien redondeadas, aspecto que fijó en
su descendencia, de modo que se ha convertido en uno de los
mejores reproductores de los últimos años, de
hecho se le sigue utilizando en países donde está
permitida la inseminación artificial. Descendiente suya
es «Willsmere Naughty But Nice», madre de uno de
los Bulldog más premiados de todos los tiempos, «Willsmere
Solid Silver».
Hoy es una de las mascotas más apreciadas
y pacíficas a pesar de su pasado sanguinario.
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